El avance del Humanismo Médico y la Medicina Narrativa: motivos para el optimismo
Doctutor
Resumen: El incremento del género narrativo en el ámbito médico está siendo en los últimos años muy significativo, reflejando así la sensibilidad actual en el mundo sanitario hacia las humanidades. Doctutor se viene haciendo eco desde hace ya varios años de ello y en casi todos los números incluimos una narrativa clínica o docente, además de apoyar y difundir las dos Jornadas Internacionales de Narrativa y Educación Medicas celebradas en España. En este artículo se destaca como este movimiento se está extendiendo de una forma muy significativa: las narrativas son ya una sección estable de las mejores revistas clínicas del mundo y en los EEUU por ejemplo, el informe de la Asociación de Facultades de Medicina de los Estados Unidos de 2020 recomienda la integración de las artes y las humanidades en la medicina y la educación médica como elemento clave para hacer a los médicos «aprendices adaptativos de por vida» y facilitarles así el desarrollo combinado del conocimiento científico, la inteligencia emocional, las habilidades analíticas y el contexto social. Por otra parte, La Fundación Arnold P organiza este año la 25 edición del Concurso de Ensayos Dr Hope B Tang donde estudiantes de enfermería y medicina presentan sus relatos clínicos.
The Advancement of Medical Humanism and Narrative Medicine: Reasons for Optimism
Abstract: The rise of the narrative genre in the medical field has been very significant in recent years, reflecting the current sensitivity in the healthcare world towards the humanities. Doctutor has been echoing this for several years now and in almost every issue we include a clinical or teaching narrative, in addition to supporting and disseminating the two International Conferences on Medical Narrative and Education held in Spain. This article highlights how this movement is spreading in a very significant way: narratives are already a stable section of the best clinical journals in the world and in the USA, for example, the 2020 report of the Association of Medical Colleges of the United States recommends the integration of the arts and humanities in medicine and medical education as a key element to make doctors «adaptive lifelong learners» and thus facilitate the combined development of scientific knowledge, emotional intelligence, analytical skills and social context. On the other hand, the Arnold P Foundation is organizing this year the 25th edition of the Dr Hope B Tang Essay Contest where nursing and medical students present their clinical stories.
La práctica de la medicina, si se hace de manera correcta, tarde o temprano lleva a sus protagonistas a “sentir sus cuerpos” y a “trascender con sus mentes lo empírico”. En ocasiones, esto se refleja con un nudo en la garganta o con lágrimas en los ojos, más frecuentemente, con un escalofrio aislado, una sonrisa o unos latidos acelerados. Todo lo anterior significa que sus protagonistas se han sentido conmovidos por la humanidad de sus interacciones. La práctica de la medicina, bien hecha, tarde o temprano nos ilustra cómo la conexión humana entre sanitarios y pacientes tiene un significado inmenso,…es la que da sentido a nuestros actos profesionales. Cuidar a nuestros pacientes en momentos de vulnerabilidad, así como en momentos de resiliencia y de inesperada gracia, representa para una gran parte de sanitarios el alimento que les hace seguir cada dia en estas profesiones de servicio a la vez que es la principal fuente de esa resiliencia.
A pesar de esto, los sanitarios no hemos prestado mucha atención a la humanidad de nuestras interacciones con los pacientes y a aprender de ellas. Nuestra educación, se ha basado en gran medida en los aspectos científicos y técnicos de nuestro trabajo, bien y sistemáticamente recogidos en los clásicos libros de texto y en los trabajos originales de investigación biomédica. Afortunadamente, cada vez es más frecuente y tenemos más acceso a estas experiencias de común humanidad, las cuales, al ser incluidas en la literatura médica, bien independientemente o compartiendo espacio en las propias revistas científicas al uso, en la modalidad de la “narrativa clínica”, nos resaltan el auténtico “valor” de nuestro trabajo. Y aquí la palabra “valor” adquiere su auténtica connotación: la no instrumental. No son pues únicamente revistas científicas médicas las que además de los tradicionales “originales de investigación” incorporan artículos de narrativa con diferentes denominaciones: (JAMA: “A piece of mind”; NEJM: “Perspective”; Patient Education and Counselling: “Reflective Practice”, Journal of General Internal Medicine: “Healing Arts”, etc) también lo hacen las de educación médica: Medical Education, Academic Medicine por citar solo dos de gran prestigio.
El avance de las Humanidades en Educación y Clínica Médicas
El incremento de este género narrativo en el ámbito médico está siendo en los últimos años muy significativo, reflejando así la sensibilidad actual en el mundo sanitario hacia las humanidades. Doctutor se viene haciendo eco desde hace ya varios años de ello y en casi todos los números incluimos una narrativa clínica o docente, además de dedicar muchos artículos a reflexionar sobre este género y a ofrecer claves metodológicas que orienten a los interesados sobre como difundir sus experiencias a través de él. De la misma manera Doctutor ha publicado gran parte de los mejores relatos presentados por clínicos en las dos ediciones que hasta ahora se han realizado en España sobre Medicina Narrativa y Educación Médica, en 2023 y 2024, organizadas por las Universidades UFV y la UAM. Sin embargo, existen cada vez más iniciativas en nuestro país y en otros de la comunidad latinoamericana que fomentan el enfoque humanístico en sanidad a través de este tipo de género y actividades.
La Fundación Arnold P y el Concurso de Ensayos Dr Hope B Tang
En los EEUU este incremento de la narrativa en el ámbito sanitario es también ya una realidad muy significativa. Un buen ejemplo de este incremento lo representa el “Concurso de Ensayos sobre Humanismo en la Atención Médica Dr. Hope Babette Tang”. Este concurso de ámbito nacional en los EEUU, lo organiza anualmente la Fundación Arnold P. Gold desde 1997, con el objetivo de alentar a los estudiantes de medicina y enfermería a participar en la reflexión y la escritura narrativa. La edición de este año 2024 recibió más de 500 ensayos y ha cumplido ya su 25 aniversario (los ensayos premiados en otras ediciones se pueden encontrar en https://www.gold-foundation.org/programs/essay-contest/past-winners/ ). La propia revista de Educación Médica, Academic Medicine (Organismo oficial de la Asociación Americana de Colegios Médicos) evalúa y publica los mejores ensayos cada año en una clara apuesta para apoyar el papel de las humanidades en la medicina y reconocer el trabajo de la Fundación Arnold P. Gold en el avance del humanismo y el profesionalismo en la atención sanitaria.
Este concurso de ensayos recibe su nombre en memoria de la Dra. Hope Babette Tang, profesora adjunta de pediatría en el Centro Médico Columbia-Presbyterian y directora médica pediátrica de la clínica de VIH del hospital hasta su muerte en 1998 a los 36 años. La semblanza que brevemente hace la fundación de la Dra Tang dice:
“Los pacientes de la Dra. Tang a menudo se enfrentaban a numerosos obstáculos además de a enormes desafíos médicos, lo que dificultaba aún más la curación. Su mantra en el cuidado de sus pacientes era «Lo que haga falta». Enfocaba la atención centrándose en la persona que tenía delante y no solo su situación médica. Muchos de sus actos clínicos solo se conocieron después de su muerte, resaltando como trataba al paciente en su totalidad, sello distintivo de la atención humanista”.
La Fundación Arnold P. Gold es una organización sin fines de lucro que defiende el humanismo en la atención médica, definido este como una atención sanitaria compasiva, colaborativa y científicamente excelente. Este estándar de atención abarca a todos y aborda las barreras que impiden dicha atención. La Fundación Gold empodera a expertos, estudiantes y líderes para crear juntos sistemas y culturas que respaldan la atención humanista para todas las personas.
En el concurso, cada año se les pide a los estudiantes que respondan a una pregunta específica en un ensayo de 1000 palabras. Para el concurso de este año, 2024, se les pidió a los estudiantes que usaran la siguiente cita de Sir William Osler, como inspiración para ilustrar cómo la conexión humana puede marcar una diferencia significativa en la atención.
“La práctica de la medicina es un arte, no un oficio; una vocación, no un negocio; una vocación en la que tu corazón se ejercitará tanto como tu cabeza”.
Se presentaron casi 500 ensayos, y un distinguido panel de jueces, que incluía a profesionales de la salud de prestigio y autores notables, revisó las presentaciones. Se seleccionaron tres ensayos ganadores de estudiantes de medicina y tres ensayos ganadores de estudiantes de enfermería, junto con 11 menciones honoríficas. La propia revista de Educación Médica, Academic Medicine se ha asociado con la Fundación Arnold P. Gold para publicar ensayos seleccionados, ejemplificando así el compromiso de esta importante publicación de Educación médica americana con el valor del humanismo en la atención sanitaria. Los ensayos ganadores se publican en números consecutivos de Academic Medicine y el Journal of Professional Nursing.
El informe de la Asociación de Facultades de Medicina de los EE UU de 2020
Este avance de la narrativa médica y a la vez el de las humanidades en medicina en los EEUU a nivel académico queda también patente en el informe de la Asociación de Facultades de Medicina de los Estados Unidos de 2020 que describe cómo la integración de las artes y las humanidades en la medicina y la educación médica permitiría a los médicos ser «aprendices adaptativos de por vida» es decir los convierte en aprendices preparados para combinar el conocimiento científico, la inteligencia emocional, las habilidades analíticas y el contexto social. La primera recomendación del informe afirma que:
«la práctica de la medicina es un arte y una ciencia, que requiere de una base en valores, principios y habilidades humanísticas, incluida una comprensión profunda de la condición humana».
El informe articula el valor de las artes y las humanidades para cultivar la empatía y la confianza, fortalecer las habilidades de observación y el repertorio cognitivo, y mejorar el bienestar y la resiliencia de los médicos y los médicos en formación. Se destacan programas ejemplares, muchos de los cuales se han descrito en algunas revistas como Academic Medicine o en MedEdPortal. Es importante destacar que el informe describe los pasos que se pueden tomar para promover las artes y las humanidades en la medicina académica, como participar en el desarrollo del profesorado; ampliar la definición de las becas utilizadas para decidir nombramientos, promociones y titularidad del profesorado; y colaborar con profesionales dentro y fuera de la medicina para co-crear recursos educativos y materiales de enseñanza.
La Narrativa Médica
La narración de historias nos permite adentrarnos en las experiencias de los demás y hacer que sintamos, observemos, recordemos y aprendamos sobre estas experiencias. La narración de historias puede transportarnos desde donde habitualmente pasamos consulta a un centro de maternidad, una unidad de oncología, un centro de salud, una unidad de cuidados paliativos o el domicilio de un paciente. Para quienes somos médicos o enfermeros clínicos y otros miembros de otras profesiones sanitarias en todas las etapas de nuestra carrera, compartir esas historias puede ayudarnos a ser más empáticos e imaginativos y a comunicar mejor la naturaleza y el peso de nuestro trabajo con los pacientes. Reflexionar sobre esas historias propias nos va a ayudar a enfocar nuestra atención con mayor claridad sobre lo que importa en la práctica y formación médicas. La Dra. Rita Charon, una de las autoras más representativas en la introducción de la narrativa médica en la educación y práctica clínicas, escribió, en 2017, sobre el papel de las humanidades médicas en la preparación de los estudiantes para una “medicina eficaz”, de esta forma elocuente y conmovedora (“To see the suffering. Acad Med. 2017;92:1668–1670”):
“He aquí una verdad dolorosa y bifurcada: afrontar de cara las realidades de las enfermedades graves en nuestros entornos de atención sanitaria occidentales contemporáneos requiere una poderosa imaginación para reconocer y luego aceptar los hechos del sufrimiento: injusto, injustificado, vengativo, impersonal, neutral, demoledor de quienes lo padecen, sin consuelo… Solo hay dos caminos abiertos para quienes deben presenciar el sufrimiento: (1) fingir que lo que les sucede a los demás es otra cosa, predecible, resecable, eventualmente curable, espiritualmente enriquecedora, o (2) verlo plenamente y soportar las secuelas de haberlo visto”.
Ilustramos este número de Doctutor con uno de los ensayos premiados este año. En “Baby J.’s Song”, (La Canción de Baby J) la estudiante de enfermería Hailey Sommerfeld describe un turno de noche en una sala de maternidad que le trae experiencias de pérdida evocándole lo sagrado. Como dice Laura Roberts en el artículo de Academic Medicine que presenta a los premiados de esta edición (“por que es importante contar historias en medicina” Academic Medicine 2024; 99(12):1317-8 DOI: 10.1097/ACM.0000000000005879): “este relato como los otros premiados te hacen un nudo en la garganta, te llenan los ojos de lágrimas y te hacen ver con total claridad los asuntos que tienen auténtica importancia en la atención sanitaria”.