Docendo Discimus ‘Enseñando, aprendemos’: Ventajas de que los propios estudiantes enseñen a otros estudiantes

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Resumen: El papel del propio estudiante como docente, denominado también, “enseñanza entre pares” se está utilizando cada vez más en la educación médica para apoyar el aprendizaje curricular tanto en contextos preclínicos como clínicos. La literatura está demostrando que existe un curriculum oculto exclusivo de la enseñanza entre pares, pero se sabe aún poco sobre esto desde la perspectiva de la enseñanza entre estudiantes o entre pares. Este artículo revisa el importante papel que parece puede tener el que estudiantes enseñen a compañeros, para aprender especialmente aspectos como: ser profesional, ser un mejor estudiante, cuidar de uno mismo y de los demás, explorar posibilidades profesionales y convertirse en un futuro docente. Además de la influencia en el curriculum oculto de la enseñanza entre pares, las evidencias disponibles señalan que el rol como docentes de los estudiantes de medicina y los médicos jóvenes será cada vez más determinante para aumentar la calidad de la enseñanza y, en algunos dominios, especialmente los no técnicos, incluso más efectiva.

docendo discimus ‘by teaching, we learn’: Advantages of students teaching other students

Abstract: The role of the student as a teacher, also called ‘peer teaching’, is increasingly being used in medical education to support curricular learning in both preclinical and clinical contexts. The literature is showing that there is a hidden curriculum unique to peer teaching, but little is known about this from the perspective of student-to-peer or peer teaching. This article reviews the important role that students teaching peers seems to have, in learning especially aspects such as: being professional, being a better student, caring for oneself and others, exploring professional possibilities and becoming a future teacher. In addition to the influence on the hidden curriculum of peer teaching, the available evidence indicates that the role of medical students and young doctors as teachers will be increasingly decisive in increasing the quality of teaching and, in some domains, especially non-technical ones, even more effective.

En el contexto de la educación médica, el papel del propio estudiante como docente, lo que se ha llamado, la “enseñanza entre pares” y podría definirse como la enseñanza por parte de «una persona que tiene la misma edad o posición social o las mismas habilidades que otras personas del grupo», (1) ha sido algo muy minoritario hasta el momento. Sin embargo, disponemos ya de evidencias que apuntan a que este tipo de enseñanza, tiene importantes ventajas, siendo más efectiva que la tradicional en ciertos dominios educativos. El propio Ronald Harden, en su conferencia en la Escuela de Verano del Escorial (U Complutense) del 2023, sobre los retos docentes del futuro profesor, señaló la necesidad de incorporar a los propios estudiantes como docentes, entre uno de ellos. 

En algunos lugares, la enseñanza entre pares es una parte común de la educación médica preclínica y clínica, y se ha señalado su impacto positivo tanto para los estudiantes como para los alumnos (2). Es fundamental que la enseñanza entre pares respalde el desarrollo de la identidad profesional al ayudar a los alumnos a gestionar las expectativas profesionales y desarrollar relaciones profesionales (3). En la práctica, el aprendizaje entre pares parece que fomenta la adquisición de conocimientos más profundos mediante el desarrollo de habilidades de razonamiento clínico y pensamiento crítico (4). Además, existen beneficios para la institución educativa y como recurso para labores sanitarias (5). Esto incluye la facilitación de la enseñanza en grupos pequeños por parte de estudiantes de medicina o médicos jóvenes, lo que además ayudaría a satisfacer las crecientes demandas de una enseñanza con recursos cada vez más escasos (5). También se ha demostrado que existen beneficios para los profesores pares, ya que «quienes enseñan aprenden» (2). Un estudio mostró que los propios profesores pares desarrollan mejores habilidades de comunicación, reflexión y liderazgo, y en la educación médica continuada facilita una cultura de responsabilidad compartida (6). Algunos autores han conceptualizado la enseñanza entre pares como parte del «currículum oculto» de la educación médica (7).  El currículum oculto se refiere a los mensajes sociales y culturales que se obtienen fuera del currículum formal (8). Estos mensajes informales dan forma a la “culturización” de los estudiantes en la medicina a medida que se desarrollan como profesionales y miembros de la profesión médica (9). Hay estudios que destacan que el currículum oculto está asociado con la enseñanza entre pares, en la medida en la que incluye la identificación con los pares, el manejo de situaciones difíciles y la comprensión de las expectativas del curso y la eventual colocación laboral (7). Sin embargo, se dispone de muy poca información aún sobre la perspectiva que tiene el estudiante (alumno) o residente de la enseñanza entre pares sobre el currículum oculto (7). Un reciente estudio realizado con estudiantes de medicina de posgrado y médicos jóvenes (internos y residentes) en una rotación clínica rural en Australia (10), abordó mediante técnicas cualitativas esta cuestión sobre lo qué constituye el currículum oculto de la enseñanza entre pares desde la perspectiva de los estudiantes de medicina y los médicos jóvenes como aprendices entre pares y además exploró cómo contribuye al desarrollo de su identidad profesional. Sus resultados mostraron que este tipo de enseñanza entre pares proporcionaba un contexto para un aprendizaje significativo sobre el rol del médico, incluyendo cómo ser un buen profesional; cómo aprender mejor; cómo ser más resiliente y cuidarse uno mismo y a los demás; cómo explorar posibilidades profesionales; y cómo convertirse en un futuro docente. En general, este estudio refuerza que la enseñanza entre pares proporciona un contexto importante para el desarrollo de la identidad profesional en medicina.

Desarrollo de la identidad profesional

El desarrollo de la identidad profesional como médico se caracteriza por el dominio de habilidades tanto “duras” (técnicas/de procedimiento) como “blandas” (no técnicas) (11). Las habilidades duras se pueden adquirir mediante educación y capacitación formal con evaluación mensurable. Las habilidades blandas como el liderazgo, el profesionalismo, la tutoría y la comunicación son menos susceptibles de una enseñanza formal y son más difíciles de aprender y desarrollar (12). Estas habilidades blandas son las que permiten que los médicos sean considerados dignos de confianza y creíbles por la sociedad (13). El estudio de Lu y Kumar (10) mostró que la enseñanza entre pares era un contexto para aprender una variedad de habilidades blandas necesarias para una práctica efectiva como futuro médico.

Aprender autocuidados y preocuparse por los demás

Varias investigaciones, sugieren también que la enseñanza entre pares proporciona un espacio psicológicamente seguro en el que los alumnos aprenden a ser considerados con el autocuidado y a preocuparse por el bienestar de sus colegas (10). Se ha demostrado que los programas de enseñanza entre pares fortalecen las estructuras de apoyo de los médicos jóvenes, ayudan a desenvolverse en el entorno profesional y crean un sentido de comunidad (14). Esto es vital en la era pandémica y pospandémica de la atención sanitaria (15) pero también en el contexto rural y remoto donde puede haber un grado significativo de aislamiento y falta de acceso a la red profesional. Aprender a ser más considerado con el bienestar puede traducirse en una mejor colaboración y en mejores resultados de salud mental para el personal médico. 

Aprender a trabajar en equipo y a enseñar a otros

También se ha demostrado que la enseñanza entre pares fomenta conductas de aprendizaje participativas y productivas (16), y los estudiantes que experimentan la enseñanza entre pares tienen más probabilidades de participar como estudiantes activos (4,10). El modelo de conducta positivo que se experimenta en el contexto de la enseñanza entre pares puede mejorar las intenciones futuras de los estudiantes de seguir una trayectoria profesional que implique la docencia. Este ciclo de feedback positivo alimenta la cultura de la enseñanza en medicina y ayuda a desarrollar la capacidad de enseñanza dentro del sistema sanitario. La enseñanza es una parte integral de la profesión médica y los médicos tienen la responsabilidad de contribuir al aprendizaje y la tutoría para las generaciones futuras (17). El papel multifacético de un médico incluye tanto el de profesor como el de alumno. La enseñanza entre pares ofrece una oportunidad para que los estudiantes de ciencias de la salud aprendan enseñando, docendo discimus ‘al enseñar, aprendemos’ (18). 

Implicaciones para la docencia y conclusiones

Disponemos ya de algunas evidencias que refuerzan la idea de que la enseñanza entre pares proporciona un contexto potente para el aprendizaje y el desarrollo de la identidad profesional de los estudiantes y residentes en el ámbito de la medicina. Por lo tanto, debería considerarse como parte importante y complementaria de los planes de estudios de nuestras facultades de medicina y programas de residencia y no representar solo un complemento opcional. Aunque aún se precisa más investigación al respecto, el desarrollo de resultados de aprendizaje explícitos cómo los de profesionalismo; mejora como alumno; cuidarse uno mismo y cuidar de los demás; explorar posibilidades profesionales; y convertirse en un futuro docente, parece que pueden ser mejor adquiridas en  iniciativas de enseñanza entre pares. Esto ayudará a revelar el currículo oculto de la enseñanza entre pares y a mejorar la conciencia tanto de los profesores como de los alumnos sobre como este rol docente de los estudiantes y residentes (la enseñanza entre pares) puede contribuir al desarrollo del futuro médico. Esto puede además mejorar la participación y la adopción de esta enseñanza entre pares tanto por parte de los alumnos como de los profesores.

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